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FIN DE CICLO DE SÁBADOS DE TEATRO CON "MISTERIO BUFO" DE DARÍO FO
El proyecto Sábados de Teatro de Estación Producciones finalizó su ciclo 2014 con la participación del grupo trujillano Comediantes Itinerantes, que presentó en las instalaciones del Hotel Casa Andina, Misterio Bufo: “El nacimiento del Juglar” del Premio Nobel 1997, Darío Fo.
Este ambicioso proyecto liderado por la directora teatral Liz Moreno, abrió el telón por primera vez el 24 de mayo del presente año en el segundo piso del Hotel Casa Andina; desde entonces ha cumplido la titánica tarea de dar función todos los sábados durante seis meses. Lo cual, permitió que en nuestra ciudad podamos apreciar el trabajo de actores y directores nacionales e internacionales que no sólo reafirmaron nuestra forma de ver teatro: apreciar la belleza del movimiento, la buena dicción, el dominio corporal de los actores, la magia de la música y del silencio; sino que también, sacudieron las conciencias del público, inyectando el mensaje a través de historias adaptadas a nuestro espacio y tiempo usando la ironía, la ácida sátira que incomoda, que rompe cánones, hábitos y costumbres de una sociedad deshumanizada y llama a la reflexión después del aplauso.
En esta última función del pasado 29 de noviembre, el público asistente apreció el trabajo corporal, vocal y rítmico de Belcka Varías Astudillo y Rebeca Guzmán Videla, que acompañadas de Leslie Cornejo Chávez en la música, y bajo la dirección de Eduardo Espinoza Carrasco presentaron “El nacimiento del juglar” la historia de un hombre que nació pobre, que tenía que trabajar muy duro para mantener a su familia, hasta que un día un hermoso monte se dibujó en sus pupilas, aparentemente no tenía dueño, y decidió tomarlo como suyo. El Juglar, trabajó día y noche hasta volverlo fructífero y el hogar ideal para su esposa e hijos, nunca más volverá trabajar para un patrón – pensaba. Así, pasaron los días en su nuevo hogar: un monte que parecía encantado, un lugar maravilloso para vivir y que ¡no tenía dueño! y ¡él, lo encontró! Pero un día, apareció el dueño de todo el valle, un hombre poderoso y tan desagradable como todo aquel que se dedica a acumular riquezas durante su existencia, y reclamó el monte como suyo. Exigió al juglar abandonar sus tierras, pero él, se negó: decisión que mantuvo firme a pesar de que el cura y el notario le aconsejaron entregar la tierra al amo, no reclamar, ni luchar por lo que él consideraba justo. Y sucedió lo que sucede con todo aquel que defiendo lo justo: fue destrozado por el poderoso dueño de las tierras. Que un día llega hasta su casa, abusa de su mujer y con sus secuaces quema todo el monte. Desde entonces, el juglar fue atormentado por el pueblo; le reclamaban haber entregado a su mujer por unas tierras y se burlaban de él, por todo lo sucedido. El pobre hombre que antes era inmensamente feliz con su familia, gracias a un regalo que parecía haber caído del cielo y que ahora está solo y sumergido en la tristeza, decide acabar con su vida ahorcándose. Un hombre que pasaba por ahí pidiendo ayuda, lo interrumpe. A la conversación se unen dos personas más y luego de un rato, el juglar se da cuenta que el que pedía ayuda era Jesucristo acompañado de Marcos y Pedro, éste le ayuda a reflexionar sobre la vida y lo motivó a regresar al pueblo y aplastar al amo.
Conforme se va desarrollando la historia, se parodia al cura deshonesto que se guarda el dinero de las limosnas y aconseja al juglar entregar y no defender lo justo; se ridiculiza al notario corrupto, franelero del feudal, regordete de tanta sobonería, con la irreverencia y polémica que caracteriza al autor de la obra, Darío Fo, autor de algunas de las obras más censuradas en Italia.
Con este excelente trabajo, Finaliza un excelente proyecto: Sábados de Teatro de Estación Producciones 2014. Y claro, seguro ustedes se preguntan lo mismo que yo: ¿Habrá teatro en nuestra ciudad el próximo año, un teatro como las obras que hemos visto: teatro consciente?, ¿Habrá Sábados de Teatro 2015? De nosotros depende; sin público no hay teatro.
Redacción: Gianfranco Mejía
Fotografía: Fernando Mendoza (colaboración especial)
*Nota realizada el 29 de noviembre de 2014.
Este ambicioso proyecto liderado por la directora teatral Liz Moreno, abrió el telón por primera vez el 24 de mayo del presente año en el segundo piso del Hotel Casa Andina; desde entonces ha cumplido la titánica tarea de dar función todos los sábados durante seis meses. Lo cual, permitió que en nuestra ciudad podamos apreciar el trabajo de actores y directores nacionales e internacionales que no sólo reafirmaron nuestra forma de ver teatro: apreciar la belleza del movimiento, la buena dicción, el dominio corporal de los actores, la magia de la música y del silencio; sino que también, sacudieron las conciencias del público, inyectando el mensaje a través de historias adaptadas a nuestro espacio y tiempo usando la ironía, la ácida sátira que incomoda, que rompe cánones, hábitos y costumbres de una sociedad deshumanizada y llama a la reflexión después del aplauso.
En esta última función del pasado 29 de noviembre, el público asistente apreció el trabajo corporal, vocal y rítmico de Belcka Varías Astudillo y Rebeca Guzmán Videla, que acompañadas de Leslie Cornejo Chávez en la música, y bajo la dirección de Eduardo Espinoza Carrasco presentaron “El nacimiento del juglar” la historia de un hombre que nació pobre, que tenía que trabajar muy duro para mantener a su familia, hasta que un día un hermoso monte se dibujó en sus pupilas, aparentemente no tenía dueño, y decidió tomarlo como suyo. El Juglar, trabajó día y noche hasta volverlo fructífero y el hogar ideal para su esposa e hijos, nunca más volverá trabajar para un patrón – pensaba. Así, pasaron los días en su nuevo hogar: un monte que parecía encantado, un lugar maravilloso para vivir y que ¡no tenía dueño! y ¡él, lo encontró! Pero un día, apareció el dueño de todo el valle, un hombre poderoso y tan desagradable como todo aquel que se dedica a acumular riquezas durante su existencia, y reclamó el monte como suyo. Exigió al juglar abandonar sus tierras, pero él, se negó: decisión que mantuvo firme a pesar de que el cura y el notario le aconsejaron entregar la tierra al amo, no reclamar, ni luchar por lo que él consideraba justo. Y sucedió lo que sucede con todo aquel que defiendo lo justo: fue destrozado por el poderoso dueño de las tierras. Que un día llega hasta su casa, abusa de su mujer y con sus secuaces quema todo el monte. Desde entonces, el juglar fue atormentado por el pueblo; le reclamaban haber entregado a su mujer por unas tierras y se burlaban de él, por todo lo sucedido. El pobre hombre que antes era inmensamente feliz con su familia, gracias a un regalo que parecía haber caído del cielo y que ahora está solo y sumergido en la tristeza, decide acabar con su vida ahorcándose. Un hombre que pasaba por ahí pidiendo ayuda, lo interrumpe. A la conversación se unen dos personas más y luego de un rato, el juglar se da cuenta que el que pedía ayuda era Jesucristo acompañado de Marcos y Pedro, éste le ayuda a reflexionar sobre la vida y lo motivó a regresar al pueblo y aplastar al amo.
Conforme se va desarrollando la historia, se parodia al cura deshonesto que se guarda el dinero de las limosnas y aconseja al juglar entregar y no defender lo justo; se ridiculiza al notario corrupto, franelero del feudal, regordete de tanta sobonería, con la irreverencia y polémica que caracteriza al autor de la obra, Darío Fo, autor de algunas de las obras más censuradas en Italia.
Con este excelente trabajo, Finaliza un excelente proyecto: Sábados de Teatro de Estación Producciones 2014. Y claro, seguro ustedes se preguntan lo mismo que yo: ¿Habrá teatro en nuestra ciudad el próximo año, un teatro como las obras que hemos visto: teatro consciente?, ¿Habrá Sábados de Teatro 2015? De nosotros depende; sin público no hay teatro.
Redacción: Gianfranco Mejía
Fotografía: Fernando Mendoza (colaboración especial)
*Nota realizada el 29 de noviembre de 2014.